Inaugurado un tramo rehabilitado de trincheras y nido de ametralladoras de la guerra civil

El pasado sábado 10 de septiembre, fueron inauguradas en las proximidades de Monforte las trincheras rehabilitadas en Cabezo Santo, en presencia de numerosos grupos de personas de diversas procedencias.

De la mano de representantes del Ayuntamiento de Monforte, de la Asociación Cultural Montefuerte, y de la arqueóloga que ha dirigido la excavación, existe ahora un acceso adecuado, unos paneles explicativos y una compresión adecuada de qué instalaciones hubo allí, accesibles desde la carretera que une este pueblo con Huesa del Común.

Rosa Loscos asciende hacia la posición. En lo alto, el nido de ametralladoras.

Esta posición de segunda línea de frente, vigilaba una amplia área de la sierra. En estas trincheras estaban establecidas columnas de soldados fieles al gobierno. Más allá de aquellas las crestas de la sierra de Oriche, estaban cerca los que se habían sublevado.

Fue un lujo que la arqueóloga Rosa Loscos, de la empresa Qualcina, nos pudiese explicar las labores realizadas, lo hallado...

Panel interpretativo. Momento de la inauguración.

Rosa Loscos explicando a los numerosos presentes lo que había y lo que se ha realizado.

Vista desde una de las ventanas.

Nos contaron que esta posición estratégica republicana de la guerra, se componía de las trincheras en tres cabezos: Val Haba, Cabezo Aparicio y Cabezo Santo, siendo esta última es la que se ha acondicionado, parcialmente, pues las trincheras que aún permanecen casi ocultas eran más largas que lo presentado.

Las trincheras eran muchísimo más profundas de lo que habíamos imaginado cuando se recorrían antes de la restauración.
Fotografías F.J.Lozano

También nos contaron que "Lo más interesante que hallamos fueron las zonas de refugios, los abrigos. Parecían abrigos naturales, pero al excavar vimos que se habían aclimatado perfectamente".

La noticia también ha tenido eco en el Diario de Teruel.

Jornadas sobre la guerra civil, en Monreal del Campo

Por otra parte, también pudimos asistir a parte de las conferencias sobre la guerra civil en el valle del Jiloca, organizadas por el Centro de Estudios del Jiloca.

El profesor y presidente del Centro de Estudios del Jiloca, José María Carreras Asensio, abordaba el tema del "Patrimonio perdido, las consecuencias de la Guerra Civil en el noroeste de la provincia de Teruel"; estuvo estupendamente explicado e ilustrado, y por esa parte del patrimonio religioso se mencionó y mostró lo perdido en los municipios de Muniesa, Plou, Cortes de Aragón y el santuario mariano, Huesa del Común, Santa Cruz de Nogueras...) que fueron ocupados por los milicianos anarquistas.

Se abordaron otros temas muy necesarios, como "La represión de las autoridades republicanas en el Jiloca al inicio de la Guerra Civil", por parte del historiador Serafín Aldecoa, o "Proyectos y actividades de la Asociación Pozos de Caudé", por Francisco Sánchez.

Otras muchas comunicaciones tuvieron lugar, sobre el contexto histórico, trincheras rescatadas en varias poblaciones, e incluso algunas muy originales, como la de El crudo invierno de la Batalla de Teruel" por el periodista Vicente Aupí, muy bien narrada e interesante pese a lo conocido del evento climático, o también el de las "Repercusiones de la Guerra Civil en los juegos tradicionales", que nos hizo la especialista comarcal Raquel Lucas.

Muy útil para nosotros, por lo metodológico y estructurado, fue la comunicación sobre el archivo de fotografía antigua del CEJ, de la guerra civil, comunicación del siembre eficiente Emilio Benedicto.

Uno de los conferenciantes.

No todo fueron conferencias de ámbito geográfico reducido, ya que resultó muy interesante e ilustrativa “El desembarco de Mussolini en la Guerra Civil española. La presencia de soldados italianos en el Valle del Jiloca”, del profesor Dimas Vaquero, la cual trató sobre los intereses internacionales de potencias fascistas en España, y su contradictoria mala recepción por parte del general Franco de los CTV, además de las vivencias de los lugareños conviviendo con las tropas.

Además, hay una exposición montada en la casa de cultura de Monreal con efectos muy seleccionados de la Guerra Civil, es de gran interés, tanto por efectos bélicos, como documentos, paneles explicativos y objetos curiosos. También hay una exposición de la bibliografía (más, menos y poco conocida) sobre la época que tiene indudable interés.

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Uno de los documentos expuestos.

Muchas gracias a todos los integrantes del C.E.J. y los investigadores y divulgadores que hicieron posibles estas jornadas. Ojalá en otras comarcas tuvieran a un centro de estudios tan profesional y activo.