Hay trabajos que dejan huella, y la minería es uno que las imprime en amplios sentidos. Con auténtico entusiasmo nos explicaron los mineros jubilados voluntarios cómo eran los pozos, vestuarios, calderas, escuela... Y ese mismo entusiasmo lo transmitían los voluntarios de la Asociación Zaragozana de Amigos del Ferrocarril y los Tranvías, que restauran y cuidan el material ferroviario recuperado (como la locomotora "La Hulla"). Niños y adultos pueden subir y circular por un tramo de ferrocarril (no el de Utrillas que usaban nuestros abuelos sino uno menor), de aquellos que trasladaban el carbón desde las bocas de las minas hasta donde lo clasificaban y trasvasaban al tren de mayor tamaño que lo dirigía a Zaragoza.
Suelen encender la locomotora La Hulla un par de días al mes (controle el calendario).
Antes de nada, hay que recordar que no estábamos hablando del Museo minero de Escucha, el que desciende a una auténtica mina de carbón, sino del complejo de museo e instalaciones auxiliares de mina en Utrillas, con el cual se complementa perfectamente.
Sí, es un encanto ver de nuevo circular a uno de esos seres animados por la respiración del vapor y el calor del carbón, acomodarte a vagones de madera, sentir el cariño con que engrasan las piezas los voluntarios para que duren otros cien años... Una gran labor por un patrimonio, por el trabajo de décadas que ha calentado Zaragoza y movido nuestra industria. Y a los niños les encanta.
Gozamos del privilegio de que un minero jubilado nos enseñase de primera mano las instalaciones que aún perviven y que se han reparado y hecho didácticas: hornos para la máquina de vapor gigante, el pozo de Santa Bárbara, vestuarios. Han cuidado especialmente la sección de las escuelas (con recreación de la clase, sus pupitres, paneles explicativos de muchos aspectos. Pequeña y concreta la sala dedicada a los fósiles aparecidos en Utrillas, incluyendo el primer dinosaurio descrito en España. Todo profesional y atractivo.
Esta comarca, de gran peso minero durante un siglo, ha trabajado y luce la recuperación del trazado del ferrocarril; nos complace el contemplar algunos de los viejos edificios vinculados a las minas, estructuras industriales que si no fuera por el museo podrían haberse perdido para siempre, borrando la huella de estas páginas de nuestro patrimonio industrial.
Es excelente, muy recomendable, para todos los públicos, visitar allí mismo una colección de útiles mineros de ámbito mundial, una gran colección, expuesta de manera sencilla pero soberbia. Creo que el aparentemente modesto "Museo de los Utensilios Mineros" es la joya de este complejo cultural y ahora lúdico. El patrimonio cultural minero de muchos lugares del mundo (lámparas a lo largo de historia, indumentaria, formas de comunicación, elementos de seguridad, útiles de extracción, detonadores... está ahí, (de minas de Alemania, Polonia, España...), en un arco temporal que abarca desde los utensilios romanos hasta la actualidad, remarcando la tradición minera de gran parte de Teruel y otras provincias de España y Europa. Una colección única, en gran parte debida a D. José Manuel Sanchis, el cuál ha cedido su colección personal al Ayuntamiento de Utrillas. Gracias desde aquí a esta persona y a todos los voluntarios que se encargan de enseñarlo los días de puertas abiertas y poner en marcha la locomotora y el tren.
Y por último, tras las instalaciones más directamente implicadas en la producción, podemos visitar el antiguo hospital minero, ahora convertido en Museo de la Ciencia y la Arqueología Minera de Utrillas. No se lo salte, porque, aunque parezca que ya se ha visto todo, ahí están las maquetas que los niños podrán poner en marcha, para simular las actividades en su conjunto. Ahí se proyecta un buen audiovisual que narra los orígenes, épocas de esplendor y de crisis. Vehículos mineros, como una locomotora, vagones, una ambulancia antigua... muchos elementos curiosos. Y cuando se cree haber visto todo, aún vemos una excelente exposición de minerales ligados a la minería del carbón, pura geología con explicaciones que volveremos para leer con más detenimiento, algún día. Y cuando ya parece que termina el museo, nos llama la atención una boca de mina, y resulta que es una larga y completa recreación. Nos marchamos con la sensación de entender mejor este oficio sacrificado y peligroso.
Y para redondear el día, también se puede comer bien en Utrillas.
Las pocas fotografías aquí reproducidas no hacen justicia a todo lo que se puede ver.
Enlace con más detalles www.minasdeutrillas.com. Y más información en el 978 075 220.
No podíamos dejar de recomendarlo.
50 aniversario. Precisamente, hace 50 años, el tren minero que unía Utrillas y Zaragoza realizaba su último viaje. Para recordar este hecho, el Ayuntamiento de Utrillas ha decidido celebrar el próximo viernes un acto conmemorativo con el que rendir homenaje a los ferroviarios que trabajaron en esta línea. Todos los detalles en la siguiente noticia de La Comarca.net.
Implicado en la historia de Blesa.
Sí, de Blesa y de muchas otras localidades, que desde el principio del proyecto de minas y ferrocarril de Utrillas, trataron de captar parte de esa prosperidad que durante décadas acompañó al paso del ferrocarril.
Puede leer sobre ello en:
"Pueblos de Teruel y Zaragoza en busca de la prosperidad: luchando por el paso del ferrocarril de Utrillas (1900).
Noticias de la pugna por acercar el trazado a diversas localidades y durante sus construcción (1900-1904)."
Publicado en "Blesa, un lugar en el mundo" en www.blesa.info en www.blesa.info/hisNoticiasComienzosFerrocarrilUtrillas(1900-1904)(JLozano).pdf