El pasado 17 de marzo de 2021 se hizo público el resultado de la elección de árbol europeo del año. Gracias a 104.264 votos de numerosos europeos ha resultado elegido este árbol de 16,26 metros de altura y más de 7 metros de perímetro, destacando entre los ejemplares de su misma especie. De España competían once árboles, y muchos otros de Europa.
No está en un bosque, se localiza en un paisaje "antropizado", humanizado, como puede ser el paisaje alrededor de la carrasca de Blesa. La carrasca de Lecina está en el parque natural de la Sierra y Cañones de Guara. También dentro del parque cultural del Río Vero.
Este árbol fue elegido entre otros de Aragón antes de presentar su candidatura: "Precisamente, se eligió este árbol como símbolo de la identidad de Aragón. Resistente (símbolo de lucha), siempre verde (símbolo de vida), floreciente en abril (mes de Aragón) y fuerte (adaptado a la climatología extrema de Aragón). De hecho, en uno de los cuarteles del escudo de la Comunidad se encuentra el árbol del Sobrarbe, una encina con historia".
Este título honorífico de Árbol Europeo del año es un concurso organizado por la Environmental Partnership Association (EPA), desde 2011, y anteriormente participó, de España, el chopo cabecero.
Contaban desde Lecina: «Antiguamente había muchos del mismo estilo y categoría pero no corrieron la misma suerte: "Los carboneros los compraban para hacerlo [el carbón]. También quisieron hacerlo con esta carrasca, pero mi padre, Nicolás, le tenía un cariño especial y se negó. Gracias a su tesón hoy podemos disfrutar de ella. Si mi padre viviera estaría contento", explica María Jesús Arasanz.»
La carrasca de Lecina tiene "una copa de 28 metros de diámetro, su sombra supera los 600 metros cuadrados y el perímetro de su tronco es de 7,5 metros. En invierno podía dar hasta 600 kilos de bellotas que alimentaban al ganado." Sería interesante poder comparar las medidas de las dos bonitas carrascas, la de Lecina y la de Blesa, últimos ejemplares de los bosques que el hombre quemó.
Complace mucho esta concesión, este reconocimiento europeo, porque la carrasca de Blesa tiene muchos parecidos, y sus circunstancias históricas son un fiel espejo de la deforestación de parte de Aragón, seco y destruido por la presión de los humanos sobre su propio entorno natural.
El final de los carrascales
Tenemos bien estudiada la época de finales el siglo XVIII y comienzos del siglo XIX y qué hacían los blesinos y pueblos próximos con sus árboles en un tiempo en que la comida salía de la tierra, de las ovejas o de las gallinas.
Tuvimos oportunidad de leer los informes de 1802 recopilados por la Real Sociedad Económica Aragonesa de Amigos del País, sobre el estado de la agricultura y la ganadería ovina a la sazón, en 20 localidades del sur de la provincia de Zaragoza y norte de la de Teruel. Conservaron para el futuro las razones de la desaparición de los bosques y monte bajo y su impacto en la disminución de la producción ganadera. Informes sobre el uso de la tierra y desaparición de los bosques en el siglo XIX en el sur de Zaragoza y norte de Teruel.En aquellos interesantes comunicados de comienzos del siglo XIX nos contaban de primera mano, para cada uno de los pueblos hasta qué época llegaron sus bosques.
De Blesa nos contaban lo contraproducente que fue para la ganadería la destrucción de los árboles: «Hace muy pocos años había un monte dilatado de carrascas, que se ha concluydo del todo; con perjuicio del Pueblo, y del ganado, pues a este lo mantenía en tiempo de nieves con oja de carrasca: ha provenido su destrucción, de la inacción de las Justicias. No ay medio para que vuelba a su antiguo estado. Convendría estimular a los vecinos a plantar árboles y prohibir quemar la leña en los campos» (es decir, hacer formigueros, quemando leñas y céspedes para hacer cenizas como abono).
Muchas lecciones se aprenden de aquellos antepasados nuestros de hace 215 años veían como su mundo iba declinando a peor.
De Huesa nos contaban: “Se han conocido grandes carrascales hace pocos años, y no ha quedado ni siquiera una raíz. No ha habido otra causa que la omisión en la Justicia; y el mal exemplo de otros pueblos, que haciendo lo mismo no han sido castigados. De esto se ha seguido perjuicio al pueblo, pues se han quedado sin leña de buena calidad, sin madera para los instrumentos rústicos, y sin un grande recurso para los ganados en tiempo de niebes, que los mantenían con oja de carrasca. Este daño se podría remediar en algo, si el monte llamado de los Moros, se destinase para monte cortado.”
Insisten en ello desde Cortes [de Aragón], dando el dato de lo escaso de la multa: “Hubo un grande carrascal, el que se ha disminuydo demasiado porque los vecinos no tienen otra leña de buena calidad; y como la pena solo es quince reales p[la]ta por carrasca, se arriesgan con facilidad a hurtarla. También ha contribuydo a la destruccion de los montes de esta tierra, la poca vigilancia de los Corregidores de Daroca, pues como están lejos de la cabeza de Partido, es difícil que el corregidor tenga noticia.”
En Alacón: “Ha conocido buenos montes de pinar, carrascal, sabina y coscoja, los que han perdido considerablemente; especialmente el pinar y carrascal se hallan en su último término, por la mucha libertad que ha abido para hacer carbon y sacar con libertad a bender toda especie de leñas, pues muchos de este pueblo no tienen otro oficio que llevar leña a bender a los pueblos ynmediatos: hañadiendose que los becinos a dichos montes cortan toda la que quiere, baliendose las mas beces de la fuerza.
De Muniesa: “Antiguamente este término estaba lleno de leñas, en especial de carrasca; y en el día no ai una carrasca cuyo tronco tenga un palmo de diametro. Se an concluido los grandes carrascales por falta de rigor en la Justicia con los que las cortaban para sus hogares, ceniza y carbón: y con los que hacían quemadas para aprobecharse del terreno. La sabina, enebro y espesar1 de carrasca y coscojo se an concluido por la libertad de romper tierras; y abuso de trasportar dichas leñas para quemarlas en los campos; y lo mismo sucede, y a sucedido con el romero; de modo que si abren dos jugadas de tierra, queman la leña que alli ha salido, y a más arrancan la que ai a las ynmediaciones del campo, para el mismo efecto.
Un catálogo para inventariar los que quedan
En Aragón existe un catálogo de "Árboles y arboledas singulares de Aragón" que podemos consultar en este Catálogo
Inventario de Árboles Singulares en la comarca Cuencas Mineras
CODIGO | NOMBRE | LOCALIDAD |
2012 - 44 - 18 | PINO COBATILLAS | ALIAGA |
2012 - 44 - 21 | PINO RODENO | SEGURA DE LOS BAÑOS |
2012 - 44 - 41 | CIPRÉS DEL JORDÁN | HUESA DEL COMUN |
2012 - 44 - 43 | SABINA DE LA FINCA DE LOS PARADOS | SEGURA DE LOS BAÑOS |
2012 - 44 - 44 | SABINA FUENTE CAROZ | ALCAINE |
También están catalogadas siete arboledas en el conjunto de Teruel.
Fuentes
Todos los detalles a fondo sobre la carrasca de Lecina en El Diario.es, por Pablo Alvira Fuertes, 24 de febrero de 2021
El catálogo de "Árboles y arboledas singulares de Aragón"
LOZANO ALLUEVA, Fco. Javier (2018) Estado de la agricultura, bosques, recursos y costumbres en 1803 / 1806, en pueblos de los ríos Aguasvivas y Martín en Aragón. Publicado en internet en "Blesa, un lugar en el mundo" en www.blesa.info/his1802-estado-agricultura-bosques-Teruel-Zaragoza_RSEAAP.pdf.