El Ayuntamiento de Blesa ha restaurado el pilón de la Burilla, lo ha revocado y pintado por entero.
En su origen, en 1939, fue un peirón levantando en conmemoración de la toma de Blesa por los Nacionales (por las tropas extranjeras fascistas italianas de los CTV en concreto) durante la última guerra civil. Tras la normal desatención que sufrió durante décadas, el pilón se había convertido en un mero destino e hito en los paseos pedestres por los montes próximos a nuestra localidad.
La pasada primavera volvió a estar de actualidad al fijar en él sus ojos la "ley de Memoria histórica" a causas de sus orígenes. Pero como decíamos hace décadas que dejó de ser un memorial con procesión para ser un hito, un mojón, un punto con nombre más.
De hecho, este año ha sido más visitado que de costumbre gracias a ser uno de los puntos de paso del reto de los cinco cabezos de Blesa, que lo ha puesto más de actualidad que lo anterior.
Pilón de la Burilla de Blesa Teruel antes de su renovación